Lenguaje, Equidad y Tolerancia

Clase del 02/02/2012

 Para empezar con este tema realizaremos 3 preguntas claves.

a) ¿Es posible detectar valores en la forma en que alguien utiliza el lenguaje?

b) ¿Se puede ser violento con el lenguaje?

c) ¿Es nuestra forma de hablar discriminatoria?

En este para comprenderlo de una manera más clara, podrás realizar analizar  canciones populares de nuestro País, en esta ocasión escucharemos y analizaremos dos de cantante Jorge Negrete. La primera es “Ay, Jalisco no te rajes” de Ernesto Cortázar y Manuel Esperón; la segunda es “La Chancla” de Tomás Ponce Reyes.

 

Después de haber escuchado las canciones:

 ¿Qué puedes decir de los valores que encontraste en ellas?

¿Cómo son los hombres y cómo son las mujeres, según las letras?

¿Estos valores son de otra época o te parecen actuales? ¿Cuál fue el contexto original?

¿Por qué seguimos escuchando estas canciones hoy en día, en pleno siglo XXI?

Producto un texto sobre las preguntas realizadas anteriormente:

Es muy importante sabes que el lenguaje de cada persona tiene mucho que decir con las personas con las que nos relacionamos ya que a través de este medio cada uno se expresa, relaciona y comunica con diferentes personas, esto al menos para mí es muy importante puesto que no simplemente es eso si no va más allá de lo que creemos que debe ser.

Es importante remarcar que el lenguaje en cada persona es distinto pero que también en este se pueden encontrar ciertos valores que te pueden ayudar a sobre salir dentro de la sociedad o que te pueden perjudicar sin darte cuenta  también, otra actitud que puedes dar a notar al expresarte con un  lenguaje muy fuera de contexto es el de la violencia donde experimentas o demuestras tu actitudes violentas ante la gente o con los que más te relacionas. Es otra de las cosas que puedes dar a notar cuando no haces el uso adecuado de este lenguaje.

En nuestra forma de hablar también podemos hacerlo de manera discriminatorio cuando a las personas  les damos una denominación por su personalidad, e incluso con los apodos ofensivos que en ocasiones decimos eso es una forma de discriminar a la gente y más cuando no le gusta la forma en cómo los llamamos.